La aproximación de las regulaciones de la UE y de EEUU es uno de los objetivos del TTPI

La Comisión Europea (CE) insistió en que la creación de un organismo para facilitar la cooperación en materia de regulación, en el marco del acuerdo de libre comercio e inversiones (TTIP) que negocian la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, no afectará la capacidad de legislar de los países. La CE dio a conocer el texto de su propuesta sobre cooperación reguladora, que presentó a EEUU en la última ronda de negociaciones celebrada en Nueva York del 20 al 24 de abril, y que incluye la posibilidad de impulsar un organismo que «controle y facilite la implementación» de esa colaboración. El documento propuesto por la UE busca crear un «marco para la cooperación entre reguladores y anima la aplicación de buenas prácticas» en materia de regulación.

Además, quiere que «ayude a identificar y utilizar las posibilidades de cooperación áreas o sectores de interés común», mientras que sus provisiones «no entrañan ninguna obligación de alcanzar ningún resultado regulador particular». 

«Las provisiones de este capítulo no restringen el dercho de cada parte de mantener, adoptar o aplicar medidas oportunas para lograr objetivos legítimos de política pública», indicó la CE, que insistió en que se podrán seguir adoptando decisiones «al nivel de protección que se considere apropiado, de acuerdo con su marco y principios reguladores».

El Ejecutivo comunitario subrayó que «nada en este capítulo debería afectar o limitar la capacidad de los gobiernos de proporcionar o respaldar servicios de interés general».

Cada parte es libre de adoptar las medidas necesarias para proteger sus productos. 

«Cada parte es soberana de adoptar las medidas que considere necesarias para lograr los niveles de protección que considere necesarios», señalaron fuentes comunitarias, que subrayaron que a través de este mecanismo «habrá más posibilidades de interacción, de manera que ambas partes se beneficien del intercambio de experiencias».

Por lo que se refiere al nuevo organismo, hicieron hincapié en que «no tendrá capacidad de cambiar ningún valor legal», ya que cada regulador tendrá la potestad de actuar en coherencia o no con su contraparte europea o estadounidense y no estarán sometidos a ninguna obligación.

Además, destacaron que se publicarán «cada año en principio» los trabajos de este organismo, que tendrá entre sus funciones el «garantizar la transparencia entre la cooperación reguladora entre las partes», algo que hará también por medio de consultas con las partes interesadas.

La aproximación de las regulaciones de la UE y de EEUU es uno de los objetivos más ambiciosos del TTIP, que en cambio ha despertado inquietud entre sectores políticos y de la sociedad civil, que temen una rebaja de los estándares comunitario de protección de los ciudadanos y consumidores.

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